El dar o recibir nalgadas por placer o Spanking, es práctica sexual que día tras día se torna más común entre la comunidad gay y placenteras para los hombres que lo practican. Según las personas que lo disfrutan, practicarlo hace que se sienta una sensación de alivio y desahogo por alguna pequeña mala pasada con su pareja y, además, para iniciar con un buen acto sexual, luego de las palmadas a su trasero.
Según los practicantes del Spank, las nalgadas dadas por su macho los hacen sentir dominado, además que, los factores sexuales que en ese momento están en juego son una gran estimulación y preparación para esos hombres que no les gusta el sexo rutinario.
¿Se puede considerar masoquista a los nalgueados, por sentir dolor y aguantar por simple placer?. La respuesta está en cada quien, pero lo cierto es que esta es una práctica que ha tomado mucha fuerza, no por el ritmo de las nalgadas sino por el placer que estas producen…
¿Te le apuntarías a unas buenas nalgadas por tu pareja, niño malo?
– Jorge
