Ha sido noticia en todos el mundo: el guapísimo modelo brasileño Guilherme Leão trabaja como vigilante de seguridad en el metro São Paulo, haciendo las delicias de todos cuantos pasan por la estación. A sus 22 años y con 1,87 cm de altura, 80 quilos de peso y unos increíbles ojos verdes, saltó a la fama gracias a las fotos que le hicieron algunos bloggeros en las vías y que se hicieron tremendamente populares en la red. Por razones más que obvias, claro está.
El joven Guilherme alterna su profesión de modelo con la de vigilante, no solo porque la belleza tenga fecha de caducidad y nunca esté de más tener algo asegurado para cuando uno no luzca tan firme, si no porque no encontraba demasiado trabajo en el mundo del modelaje a pesar de sus evidentes encantos.
Pero tras su aparición en las redes se ha convertido en todo un fenómeno internacional y ha concedido multitud de entrevistas y reportajes a medios internacionales, además de recibir decenas de ofertas de trabajo.
Si quieres saber más de él, puedes seguirle en su página de fans en Facebook.
Mientras tanto, yo ya he ido reservando unos billetes para Brasil. Incluido un bono para le metro, claro.
@atzur