El ex jugador de rugby y actual activista LGBT inglés Ben Cohen nos encanta. Tiene todo lo que nos gusta en un hombre. Una sonrisa matadora, unos increíbles ojos azules, brazos musculosos, grandes y peludos pectorales y además, le encantan los gays. En mayo del año 2011, poco antes de cumplir 33 años, Cohen se retiró del mundo del deporte y se enfocó en su activismo a favor de la comunidad homosexual con su organización The Ben Cohen StandUp Foundation con el objetivo de combatir la homofobia y el bullying.
Ben nació un 14 de septiembre de 1978 en Northampton, Inglaterra y a los 12 años comenzó a practicar rugby en el equipo Northampton Old Scouts RFC. Su carrera profesional comenzó en el año 1996 en Northampton Saints, equipo en el cual jugó durante más de 10 años, antes de mudarse a Francia en el 2007 para formar parte del Club Athlétique Brive Corrèze Limousin donde estuvo durante dos años antes de volver a Inglaterra para jugar en los Sale Sharks.
En el año 2000, la vida de Ben dio un vuelco cuando su padre murió luego de ser golpeado por tres hombres en el nightclub Eternity, del cual era propietario. Peter Cohen intentó interceder en una pelea en la cual uno de sus empleados estaba siendo atacado y sufrió varias heridas que causaron su muerte luego de un mes en terapia intensiva. Fue este hecho el que llevó a Ben a comenzar a trabajar por los derechos de la comunidad LGBT en contra de la discriminación, la homofobia y el bullying.
La Ben Cohen StandUp Foundation nació en el año 2011 con el objetivo de “generar conciencia de los efectos dañinos a largo plazo que causa el bullying y de recaudar fondos para brindar apoyo a aquellos que trabajan para ponerle fin”. Según las palabras del propio Ben, “he escuchado de boca de muchos fanáticos y amigos cómo el bullying ha impactado en sus vidas, y eso me movió a tratar de hacer una diferencia para ellos. Padres me han escrito, y han compartido dolorosas historias acerca de cómo sus hijos, quienes pueden ser percibidos como diferentes, son atacados y asustados en sus propias escuelas”.
Una de las principales herramientas de la fundación para recaudar fondos son los calendarios que incluyen fotos de Ben con muy poca ropa que lanzan cada año. A pesar de que muchos escépticos acusan al ex deportista de hacer dinero a costa de los gays, el hecho de que la recaudación de la venta de esos calendarios sirva para ayudar a los miembros de la comunidad LGBT que sufren discriminación y homofobia, debería ser suficiente para convencer a los haters de que se trata de una causa noble.
Con el objetivo de promover su organización, Ben apareció en la tapa de las revistas Compete y Out en julio y agosto de 2011 respectivamente. Un año más tarde, ilustró la portada de la publicación Gay Times. El año pasado también posó para la portada de la legendaria revista gay Attitude, luciendo solamente un pequeño calzón blanco. En junio de 2013, Ben fue inducido en el National Gay and Lesbian Sports Hall of Fame en Chicago por su trabajo en pos de los derechos de la comunidad LGBT.
El año pasado, aprovechando su estatus de estrella en el Reino Unido, Ben fue uno de los participantes del concurso de baile televisivo Strictly Come Dancing de la BBC One. Allí, Cohen demostró que lo suyo no es la danza, aunque deleitó a los televidentes con apariciones a camisa abierta, musculosa o simplemente, con el torso desnudo.
¿Qué opinan de Ben Cohen? ¿Les parece sexy? ¿Creen que su fundación es una buena y noble idea o que se aprovecha de los gays para ganar dinero?
– Rico