Cada día nos miramos decenas de veces el pene, ya sea para miccionar, masturbarnos o lo que sea que se nos ocurra hacer con él. Pero muchas veces ignoramos las señales que nuestra verga nos lanza sobre nuestro estado físico. Y es que si prestamos atención y miramos bien nuestra polla, descubriremos muchas cosas sobre nuestro cuerpo; avisos de que algo no está funcionando bien y que nos advierten de que deberíamos visitar al médico.
- Pérdida de la potencia sexual.
Las enfermedades cardíacas tienen relación con la disfunción eréctil debido a que para la erección es necesaria la acumulación de sangre en el miembro. Si hay problemas con los vasos sanguíneos, la cosa no sube y puede ser una antesala de problemas mayores.
- Marea roja.
Si estás orinando sangre puede ser que tu próstata, tu vejiga o tu riñón estén enfermos. No esperes y acude pronto a un médico, puede ser un tema muy serio. Si tu semen presenta un aspecto rosáceo o rojizo, es menos preocupante, pero aún así requiere examen médico: podría ser prostatis causada por una infección de la bacteria E. coli.
- Si se apaga tu llama.
¿Gatillazos? ¿Falta de libido? Puede tener que ver con tus ronquidos. Como lo oyes. La apnea obstructiva del sueño hace que los hombres tengan menos oxígeno en sangre y que disminuya su deseo sexual, además de bajar la testosterona. Así que si tienes la colita dormidita y notas que respiras regular al despertar, háztelo mirar.
- Pene globo.
¿Tienes el pene inflamado, enrojecido y con dolor en el prepucio? Tienes balanitis debida a la falta de higiene que permite la proliferación de bacterias, hongos y virus de diversa índole. Además del tratamiento necesario para esas infecciones, mira si tienes diabetes, ya que los diabéticos son el triple de propensos a desarrollar este tipo de patología.
- Un pito insensible.
La mala alimentación produce un déficit de vitaminta B12 y folatos con la consecuente afectación de las fibras nerviosas que dejan de conducir correctamente las señales de tu verga al cerebro. Otra causa de insesibilidad puede ser por diabetes. Así que para sentirte bien, tienes que sentirte el pene.
- Eres un meón.
La hiperplasia benigna de próstata produce una constante necesidad de orinar, suele aparecer a partir de los 40 y afecta al 90% de los hombres mayores de 70 años. Si sientes ganas de mear a todas horas, mira que no sea por tener la próstata como una bola.
- Ni te vienes ni te vas.
Si de manera habitual eyaculas muy poco y no consigues llegar al orgasmo seguramente tengas los niveles de testosterona por los suelos. Otra fuente de problemas pueden ser los medicamentos para la depresión. Sea como fuere, si cuando te vas a correr el semen no viene, es que algo lo retiene.
- Erección angulada.
La enfermedad de Peyronie, de origen genético o debido a la falta o exceso de actividad actividad sexual, provoca que el pene erecto se doble hacia arriba con un ángulo de 30º o más. Esto es debido a la formación de placas de colágeno en el tejido conjuntivo que rodea el interior esponjosos del pene. Un nivel alto de glucosa también provoca el mismo efecto, ya que activa a las células madre del pene para que fabriquen placa. El 23% de los hombres mayores de 40 años padecen esta patología.
Fuente: Men’s Health
Si os gustó el artículo, no dudéis en comentarlo y compartilo en vuestras redes sociales. Y recordad, miraos el pene 😉