George Quaintance, el diseñador, bailarín y pintor de los años cincuenta yanqui no vivió lo suficiente para ver sus pinturas expuestas y entender su legado. Es una de las figuras más influyentes en la recreación del físico masculino y uno de los pioneros del arte homoerótico.
Vaqueros y marineros fueron sus estereotipos favoritos a la hora de dibujar, exhibiendo una musculatura idealizada que continúa vigente en la cultura gay actual pero que se remonta a las antiguas Grecia y Roma.
Algunos artistas lo han llamado el pionero del arte homoerótico, por lo menos en los Estados Unidos, y en las décadas de los años cuarenta y cincuenta del siglo XX cuando la representación gráfica de la homosexualidad era un tabú sociocultural e incluso estaba penalizada.
Sin embargo Quaintance se las ingeniaba para comercializar discreta y cautelosamente sus obras: retratos deliciosos de hombres latinos incrustados en escenas del lejano oeste o de los imperios griegos y romanos.
De hecho, debido a la homofobia reinante y persecución legal de aquel momento, sus pinturas no exponían los genitales de los modelos. Su homoerotismo estaba lejos de la pornografía, pero quedó excluído de los círculos paternalistas homófobos y del mercado artístico convencional.
Aunque muy en el clóset del arte, George quería dejar un legado y tomaba anfetaminas para no dormir y poder terminar sus óleos y trabajos. Su obra está teñida de un componente kitsch invadido de hombres latinos en escenas exóticas.
Amantes latinos… sus modelos favoritos. Su pareja era el puertorriqueño Víctor García con quien vivió en Los Ángeles y en una casa en Arizona que convirtió en su estudio y la llamó: Rancho Siesta.
La genial editorial Taschen tiene en su catálogo el libro que expone su obra integral: Quaintance. Y dicen en la tapa que estamos ante el primer artista que se atrevió a pintar “un mundo de fantasía masculina poblada por dioses griegos, amantes latinos, vaqueros lujoriosos y musculosos peones”.
Así que ya saben… antes de Bob Mizer y Tom de Finlandia vino George Quaintance, el padre del homoerotismo yanqui.
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Koch