Unos tres millones de brasileños participaron en el Desfile del Orgullo Homosexual en la mayor ciudad del país. “Nuestros principales enemigos hoy son los fundamentalistas religiosos”, indicaron los organizadores del evento más grande de la comunidad LGBT a nivel mundial.
Millones de personas, se congregaron este domingo en las avenidas Paulista y Consolacao de San Pablo para exigir un verdadero estado laico en la tradicional marcha del orgullo gay de Brasil.
Bajo el eslogan “Independientemente de nuestras creencias, ninguna religión es ley. Todas y todos por un Estado laico”, los brasileños celebraron la 21ª edición del desfile, uno de los mayores del mundo en defensa de los derechos de la comunidad LGBT.
Además de las tradicionales banderas con los colores del arco iris, símbolo mundial del movimiento LGBT, y de las coloridos y esplendorosos disfraces de algunos de los participantes, en el desfile de este domingo destacaron los coros contra el fundamentalismo religioso y en defensa de un Estado laico.
Las aceras de la avenida Paulista, totalmente llenas, eran intransitables. Hadas, ángeles, vedettes y policías ocupaban cada espacio del asfalto.
Desde los camiones fueron interpretados diferentes géneros musicales, incluyendo samba, sertanejo (country brasileño), funk y electrónica, para las cientos de miles de personas que desfilaban detrás de los tríos o tan solo los veían pasar.
Colorido, atrevido y provocador, el desfile del orgullo gay moviliza además mucho dinero cada fin de semana de Corpus Christi en San Pablo.
Cálculos de ediciones anteriores apuntan a que 44,2% de los asistentes son del interior del país y que gastan cada uno en promedio de 450 dólares durante la visita a la ciudad para ir al evento.
Tras un desfile de cerca de 6 horas en el que los tríos eléctricos recorrieron 3,5 kilómetros en calles del centro de San Pablo, los manifestantes se concentraron en la explanada del Vale do Anhangabaú para disfrutar de un concierto de la cantante Támara Angel, que se extendería hasta entrada la noche.
Los manifestantes llevaron imágenes modificadas del presidente estadounidense, Donald Trump, y del mandatario ruso, Vladimir Putin, a quienes acusan de homofóbicos.
Según la Asociación del Desfile del Orgullo de Gays, Lesbianas, Bisexuales y Transgéneros de San Pablo (Apoglbt SP), el factor religión incide de forma clara en la toma de decisiones económicas y políticas de Brasil.
Según la municipalidad, el Desfile del Orgullo Homosexual es, junto con el Gran Premio de Brasil de Fórmula Uno, el evento que más turistas atrae a la ciudad.
La lucha por igualdad de la comunidad LGBT ha rendido frutos en Brasil. Cirugías para cambio de sexo en hospitales públicos, adopción de niños por parejas del mismo género, matrimonio civil y permiso de maternidad para los padres son algunas de las victorias logradas en los últimos diez años.
La masiva movilización en defensa de los derechos de los homosexuales en la mayor ciudad de Brasil, sin embargo, no oculta que este es uno de los países que más registran homicidios y agresiones en el mundo por discriminación contra los homosexuales.
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Créditos: Infobae
