Al parecer estábamos equivocados al creer que era en la adolescencia.
Existen muchos mitos relacionados con la sexualidad, algunos tienen que ver con la masturbación. Uno de ellos se refiere a la edad en que las personas se masturban más.
Si bien es cierto que la adolescencia es la edad en que descubrimos esa actividad y que las hormonas se encuentran en su punto máximo de ebullición, la realidad es que esta no es la edad en que más nos masturbamos.
La Universidad de Indiana realizó el estudio National Survey of Sexual Health and Behavior para determinar el uso del condón por las personas activas sexualmente. Durante la investigación encuestaron a 5,865 personas entre 14 y 94 años de edad.
Según la investigación, las edades entre 25 y 29 arrojaron los índices más altos de masturbación por encima de los períodos entre 14 y 15, 16 y 17, 18 y 19. Estas edades fueron las más activas en ambas modalidades de la masturbación: en solitario o en compañía.
Sorprendentemente, el período entre 25 y 29 es el más activo en otras prácticas sexuales como el sexo oral o anal.
Este estudio demuestra varios datos interesantes, además de desmitificar la adolescencia como la fiebre de la masturbación.
Si bien es cierto que los niveles hormonales después de los 25 son inferiores a los de la adolescencia, este no es el único factor que determina el deseo sexual.
En este periodo de vida, las personas tienden a conocerse mejor y a tener más experiencia en las prácticas sexuales personales.
En realidad, el deseo sexual tiende a mantenerse más o menos igual durante muchos años, siempre y cuando el organismo mantenga un buen estado de salud.
Los verdaderos asesinos del deseo sexual no son las hormonas, sino condiciones como la depresión, diabetes, hipertensión, cáncer, deficiencias circulatorias, problemas neurológicos, estrés extremo, la falta de tiempo y espacio, entre otros.
De manera que los jovencitos todavía tienen mucho que ensayar antes de llegar al pico de esta práctica.
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Créditos: MEN