Interesante.
Yo me apasiono con el sexo y por eso vivo utilizando las apps de ligue constantemente para ligar chicos; pero no por ello pienso en sexo todo el día. ¿Y tú?
La principal forma de descubrir a un adicto sexual pasa primeramente por un diagnóstico y evaluación profesional, no obstante, se puede detectar a un adicto por su comportamiento social y la forma de enfrentar el tema sexual en la vida diaria.
Mentiras
un adicto al sexo utiliza frecuentemente mentiras para conseguir lo que busca, sin importar las consecuencias o la veracidad de sus palabras.
Dedicación absoluta
El adicto sexual está siempre preocupado y gasta muchas horas del día en conquistar a alguien, utilizando todos los recursos disponibles para lograr su propósito de satisfacción.
Oídos sordos
Por lo general un adicto al sexo no mide consecuencias y hace oídos sordos ante cualquier amenaza, no dando pie atrás especialmente cuando se enfrenta a un problema serio.
Pornografía
Los altos niveles de consumo de pornografía, en todas sus vertientes y corrientes cinematográficas, es una realidad que va ligada a la adicción.
Indomable
Un adicto al sexo no conoce el autocontrol. Por más que las experiencias y los límites sean claros, un enfermo pierde el control y sobrepasa cualquier frontera.
No muy placentero
Por lo general, lejos de sentir placer y relajación, los adictos al sexo suelen sentir vergüenza, arrepentimiento, remordimiento y ansiedad después del acto.
Tobogán emocional
Una de las características bien marcadas de un adicto al sexo es el vaivén de emociones a la que se enfrenta después de un acto sexual, pasando de la euforia al bajón en pocos minutos, siendo la única solución posible otro encuentro sexual y así sucesivamente.
Pese a que este tipo de conductas que puede desencadenar serios problemas a un adicto, existen especialistas dispuestos a ayudar, encontrando las razones que desencadenan esa dependencia y enseñando técnicas de control sobre las conductas sexuales mediante psicoterapia o fármacos como los inhibidores sexuales.
Lo importante es tener claro que, como toda adicción, en este caso la sexual, es una enfermedad por lo que hay que recurrir a un profesional calificado para recibir el tratamiento indicado antes que sea demasiado tarde para una terapia.
Créditos: MEN