En este nuevo arte virtual de hacerse autofotos o selfies uno puede tomar cientos de posturas, aunque el fin siempre será el mismo: captar la atención de un público ávido de carne, sensualidad y ángulos de cámara imposibles. Cada persona es un mundo y cada cuerpo necesita un encuadre distinto para resultar favorecedor, pero aquí tenéis diez fantásticos ejemplos de cómo ir calentando al personal y vender el pescao. Y es que ese punto de tratar de seducir pero sin caer en lo soez y sin que Instagram te borre las fotos y la cuenta por cerda transgredir las normas de decoro de la aplicación, se ha convertido en un todo un arte del “uy sí, pero no”.
1. Selfie estándar frente al espejo. GuyWithIphone and low battery
2. Uy que me bajo el pantalón pero no.
3. Que se le caiga la toalla.
4, 5 y 6. Dando vueltas en la cama. Momento mareo.
7 y 8. Dándose placer. Onanismo visual.
Fotos en el gym, jugar con las sábanas en la cama, tentar con la toalla o pasar la mano de forma insinuante por nuestro pubis, son algunos de los must que toda serie de selfies guarrindongas debe tener. Y, cuando la cosa ya esté animada, toca mostrar los cuartos traseros.
9 y 10. Lomo de maromo.
Ahora podemos decir aquello de ¡Aibá qué chulazo! ¡Y qué culazo! Y recuerda, sube tus mejores selfies en tu perfil de Manhunt.net